EL BONSÁI Y SUS TÉCNICAS DE CULTIVO.. PARTE II

EL RIEGO

El riego es uno de los trabajos más relevantes en el cultivo de un bonsái. La mayor parte de los fracasos a la hora de cuidar uno de estos árboles derivan de un exceso de agua que origina que las raíces se pudran. Hay que comenzar a proveer de agua a la planta cuando se observe que las primeras capas de la tierra están secas. Así, de echará abundante líquido, hasta que salga por los agujeros de la base de la maceta.

Resulta perfecto regar usando agua reposada, es decir, contenida en un recipiente durante 24 horas para que se evapore el cloro y esté a temperatura ambiente. Muy beneficioso es el pulverizado como complemento del riego.

 

 

ABONADO

El bonsái encuentra los componentes nutritivos en el suelo. Al desarrollarse en un espacio muy reducido, es necesario fertilizar el sustrato periódicamente para evitar las posibles carencias de nutrientes. Para que la planta pueda completar su proceso vital necesita tres componentes básicos o macroelementos: nitrógeno, fósforo y potasio. El primero, acelera el crecimiento y aumenta la producción de semillas, hojas y frutos. El fósforo prepara a la planta para resistir condiciones adversas. Y el potasio aumenta la resistencia frente a las enfermedades. Otros que también precisa en menor cantidad son el magnesio, el azufre, el calcio, el hierro, el cobre, el cinc, el cloro, el boro y el manganeso.

La tierra especial para el cultivo de bonsáis tiene elementos secundarios en cantidad suficiente, pero sí que requiere un aporte extra de macroelementos. Los abonos más recomendables son los complejos 5N- 10P- 10K o 2N- 10P- 10K.

Algunos consejos a seguir son, no fertilizar en verano o invierno y reducir la dosis de nitrógeno que se aplica a una planta con follaje exuberante. Además, los bonsáis de hoja caduca se abonan después de que hayan aparecido los nuevos brotes. Las de hoja perenne, dos veces al mes y las de flores y frutos antes de que estos se marchiten.

 

TÉCNICAS DE ENVEJECIMIENTO

La vejez es uno de los atributos más apreciados de un bonsái. Las técnicas del ‘Jin’ y en ‘Shari’ contribuyen a aumentar esta apariencia.

Un ‘Jin’ es una zona de madera muerta en la extremidad del tronco o de las ramas. Un ‘Shari’ es un área de madera muerta en cualquier parte de árbol.

Para crear un ‘Jin’ se eligen ramas que se deben eliminar. Después, se deja la madera al descubierto, sacando la corteza. Para acelerar este proceso, se limpia la madera al descubierto con una mezcla de azufre y cal al 50%. Hay que poner cuidado en no dañar las partes sanas del bonsái.

EL ARTE DE CULTIVAR BONSÁIS

Hoy en día, la mezcla de culturas y adaptación de costumbres de unas a otras, es un característica que se da en nuestro mundo globalizado. Una muestra de eso, y es a la cual vamos a referirnos es a un tipo de arte que involucra a las plantas. Este arte al que nos referimos es el Bonsáis. Bonsái es una palabra China, al igual que el origen de este tipo de trabajo con las plantas, deriva de Bon, que significa bandeja y Sai, que significa naturaleza. Fue trasladado a Japón, por los budistas, convirtiéndolo en una filosofía de vida.

El bonsái consiste en reducir el tamaño de los árboles mediante técnicas de podado, alambrado, etc y todo esto para darle una forma y un significado a el árbol. Este tipo de técnica, se empezó a implementar hace miles de años, para dárselos a los monjes taoístas, como modo de ofrenda, ya que para ellos representaba la eternidad, y el árbol significaba una conexión entre el cielo y la tierra; y durante años solo los nobles y personas de la alta sociedad tenían acceso a este tipo de arte.

La técnica del bonsái se puede aplicar a todo tipo de árboles, pero generalmente, quienes se encargan de desarrollar y poner en practica este tipo de arte, buscan los árboles que sean mas resistentes a todas las podas y de mas técnicas de cortar troncos y ramas adecuadas para mantener el pequeño tamaño de los árboles. Este método no puede ser aplicado a la ligera, ya que quienes no conocen las técnicas para realizar este tipo trabajo, pueden llegar a matar a el árbol. Para el cultivo del bonsái, lo mas recomendable es hacerlo en el exterior, épocas de climas cálidos y en épocas de climas muy fríos, protegerlos con luz artificial para aplicarles el calor necesario.

Existen dos tipos de bonsái, aquellos que se pueden cultivar en el interior, y aquellos que se pueden cultivar en el exterior como antes hemos nombrado. Los que se pueden cultivar en el interior, son los árboles que vienen de los climas mas cálidos, y las temperaturas que rondan generalmente nuestras viviendas son ideales para el cultivo de este tipo de árboles bonsái. Y los bonsái del exterior son aquellos que no provienen de climas cálidos, sino de cualquier tipo de clima.

Técnicas Del Bonsái

Para poder aplicar las técnicas del bonsái, hay que prestar mucha atención al tipo de árbol que vamos utilizar para realizar el bonsái, y a eso sumarle las características del clima, riego y temperaturas que necesitan. Para mantener un buen bonsái, se deben tomas ciertas medidas. Con respecto al riego, si vemos signos de que se empieza a secar la superficie, debemos aplicarle la cantidad de agua necesaria hasta que drene por los agujeros de la maceta. Generalmente suele secarse apenas comienzan a elevarse las temperaturas, por eso hay que tomar muchas precauciones en esa época del año. Si notamos que el agua no llega a penetrar en el suelo de la maceta, se debe sumergir la misma durante unos minutos en agua para que de esta manera pueda penetrar el agua y hidratar a el bonsái.

Este método solo debe utilizarse en el caso de que el árbol ya se encuentre un estado preocupante. Ahora bien en el momento de podar a nuestro pequeño árbol, debemos tener en cuenta ciertas medidas y recomendaciones. Primero, hay dos tipos de podas para el bonsái, la primera, es de mantenimiento y la segunda se llama drástica o de formación. La poda de mantenimiento, se trata de aquella que hacemos de a poco, y con mucho cuidado, para ir dándole la forma que queremos darle al bonsái. Esta se hace quitando las hojas que estén en peor estado o quitando aquellas que están mas superficiales. Por el contrario la poda de formación o drástica, es la cual, se hace desde un comienzo para darle la forma que va a empezar a tomar. Se hacen cortes profundos en el árbol y en su tronco, para acomodar su contextura a la imagen que queremos darle.

El trasplante de este tipo de árboles, se debe realizar cuando la tierra ya no logra aportar los nutrientes necesarios. Esto generalmente ocurre luego de 2 o 3 años desde que esta con esa tierra. Para trasplantar el bonsái, se debe hacer en época primaveral, ya que es en la estación en la que el árbol esta con mayor vitalidad. Para esto se debe retirar desde las raíces, como sumo cuidado para no dañar las mismas.

Un agregado que se le puede hacer a los bonsái, y que generalmente es utilizado es, la aplicación de musgos, que le brindan la posibilidad de poder conservar por mas tiempo la humedad, en especial en época de altas temperaturas. Los bonsáis se pueden clasificar según el tamaño y el estilo. Dentro de la clasificación por tamaño, encontramos el Chocan ( tronco recto y forma triangular de la copa), Sacan ( el cual tiene el tronco inclinado y su copa triangular), Han Kengai ( la copa en forma de cascada) y el Neagari ( el cual tiene las raíces expuestas al exterior, con el tronco sin ninguna forma especifica), etc.

Dentro de la clasificación por el tamaño encontramos, el Shito ( no mayor a cinco centímetros), el Mame ( de cinco a quince centímetros de altura), Komono ( de quince a cuarenta centímetros de altura), el Chumono ( de cuarenta a ochenta centímetros de altura) y por ultimo el mas grande de los bonsáis con una altura que va desde los ochenta centímetros hacia arriba, el Omono.

 

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